
La Economía en América Latina: Cinco Años de Transformación
julio 31, 2025El debate global sobre la reducción de la jornada laboral ha llegado con fuerza a América Latina, generando tanto expectativas como una considerable incertidumbre en el tejido empresarial y gubernamental. Ante este escenario, el análisis de expertos es fundamental para navegar la complejidad del cambio. Mariano Aveledo, referente en la consultoría estratégica desde CHF Advisors, ofrece una visión profunda sobre las 10 claves económicas que determinarían el impacto de esta medida en la región.
Más que una simple reducción de horas, se trata de una potencial reconfiguración del paradigma laboral. A continuación, se desgranan los puntos esenciales de su análisis.
1. Un Debate Global con Realidades Locales
El primer punto que Aveledo subraya es que no se pueden importar modelos europeos o norteamericanos sin una adaptación profunda. La reducción de la jornada laboral en América Latina se enfrenta a desafíos únicos, como una menor productividad media, una alta tasa de economía informal y una gran heterogeneidad entre sectores, factores que condicionan por completo la viabilidad de la propuesta.
2. La Productividad es la Variable Clave
El análisis es contundente: una reducción de horas solo es económicamente sostenible si viene acompañada de un aumento proporcional de la productividad. No se trata de trabajar menos, sino de trabajar de forma más inteligente y eficiente. Sin ganancias reales de productividad, la medida se traduciría directamente en una pérdida de competitividad.
3. El Impacto Directo sobre los Costes Laborales
Para las empresas, especialmente para las PYMES que forman el grueso del tejido empresarial latinoamericano, una reducción de jornada sin un ajuste productivo inmediato significaría un incremento de los costes laborales por hora. Esto podría presionar los márgenes de beneficio y limitar la capacidad de inversión y contratación.
4. El Desafío de la Economía Informal
Según Aveledo, uno de los mayores riesgos es el efecto sobre la vasta economía informal de la región. Una legislación que solo afecte al sector formal podría ampliar la brecha entre trabajadores con derechos y protecciones y aquellos que operan en la informalidad, generando nuevas tensiones sociales y distorsiones económicas.
5. No Todos los Sectores son Iguales
El impacto de una semana laboral de 4 días no sería homogéneo. Mientras que los sectores tecnológicos, creativos o de servicios profesionales podrían adaptarse con mayor facilidad mediante la digitalización, los sectores manufactureros, agrícolas o de atención presencial enfrentarían desafíos mucho mayores para mantener sus niveles de producción.
6. Un Catalizador para la Automatización y la Tecnología
Una consecuencia inevitable de trabajar menos horas para producir lo mismo es la aceleración en la adopción de tecnología y procesos de automatización. Mariano Aveledo lo ve como una oportunidad para modernizar la industria, pero también como un reto que exigiría una fuerte inversión en la recualificación de la fuerza laboral.
7. Una Herramienta para la Atracción y Retención de Talento
En el competitivo mercado del talento formal, ofrecer una jornada laboral reducida puede convertirse en una poderosa ventaja competitiva. Las empresas que logren implementar este modelo de forma exitosa podrían atraer y retener a los mejores profesionales, quienes valoran cada vez más la flexibilidad y el bienestar personal.
Potenciales Oportunidades ✅ | Riesgos y Desafíos a Gestionar ⚠️ |
Aumento de la productividad por hora y la innovación. | Incremento de los costes laborales, especialmente en PYMES. |
Mejora en la atracción y retención de talento. | Brecha creciente con la economía informal. |
Mayor bienestar del empleado y nuevos patrones de consumo. | Necesidad de una fuerte inversión en tecnología y automatización. |
Estímulo para la transformación digital de las empresas. | Riesgo de pérdida de competitividad en sectores no adaptables. |
8. Cambios en los Patrones de Consumo y Bienestar
Un mayor tiempo de ocio podría reconfigurar la economía. Se potenciarían sectores como el turismo local, la cultura, el deporte y el bienestar. Este cambio en los patrones de consumo podría generar nuevas oportunidades de negocio, pero requiere una adaptación de la oferta de servicios.
9. La Implementación: Gradual y Negociada
El análisis de Aveledo concluye que una implementación exitosa no puede ser una ley universal y abrupta. Debería ser un proceso gradual, negociado entre gobiernos, empresas y trabajadores, y posiblemente implementado a través de programas piloto sectoriales que permitan medir el impacto real antes de una generalización.
10. La Necesidad de un Asesoramiento Estratégico
Para una empresa, afrontar un cambio de esta magnitud exige una planificación rigurosa. Es indispensable contar con un asesoramiento financiero y estratégico que permita analizar la estructura de costes, medir la productividad y diseñar una hoja de ruta viable. Firmas como CHF Advisors se especializan en guiar a las compañías a través de estas transformaciones complejas, asegurando que los cambios estructurales se conviertan en una ventaja competitiva y no en un lastre.
El debate está sobre la mesa. Entender sus múltiples aristas es el primer paso para tomar decisiones informadas.
Anticípese a los Cambios Económicos con Asesoramiento Experto.